La Notta

La Fiscalía peruana acusa al expresidente de Perú, Alberto Fujimori de aplicar una política de planificación familiar forzada violatoria de los derechos humanos que lo único que buscaba era esterilizar a mujeres de escasos recursos para reducir la pobreza.

Las esterilizaciones forzadas de miles de mujeres pobres e indígenas se realizaron entre 1996 y 2000 de las cuales al menos 270.000 peruanas pobres fueron sometidas a cirugías de ligadura de las trompas de Falopio, como parte del Programa Nacional de Salud Reproductiva y Planificación Familiar.

Fujimori quien cumple una condena de 25 años por violaciones a los derechos humanos y tres exministros de salud están siendo juzgados. El fiscal Pablo Espinoza afirma que son inculpados por jugar con las vidas y la salud reproductiva de las personas, sin importarles el daño causado.

Entre los ministros de salud se encuentran Eduardo Yong Motta, Marino Costa Bauer y Alejandro Aguinaga, además un equipo de médicos cirujanos que intervinieron a las víctimas, de las cuales murieron cinco por complicaciones tras la ligadura de trompas.

Cientos testimonios han sido compartidos  como el Rute Zúñiga quien relata que fue amarrada de pies y manos para que no se pudiera defender mientras tres enfermeras  un doctor la esterilizaran sin consentimiento, y luego fue chantajeada y hostigada por las autoridades locales que la provincia de Anta, en Cusco Perú, quienes la amenazaron diciéndole que no registraron a su hija recién nacida si no acudía al primero al centro de salud.

Según investigación de 1999 del Defensor del Pueblo, el 22% de las mujeres peruanas esterilizadas eran analfabetas. El organismo recibió la primera denuncia de esterilización forzada en 1997. En 2015, el Ministerio de Justicia abrió un registro de víctimas de estas prácticas, con el fin de facilitarles orientación legal, y hasta el año pasado unas 8.000 estaban registradas