El Gobierno de Reino Unido presentó un proyecto de ley que pretende acabar con la crianza de perros y gatos , para acabar con el maltrato animal.
La “Ley de Lucy” surge a raíz del caso de una perrita en el 2016 que tenía las caderas fusionada, entre otros problemas a causa del encierro en una jaula de una granja para perros en Galende.
Iniciativa fue presentada por Michael Gove secretario de Medio Ambiente, ante el Parlamento en busca de que los cachorros y los gatos no puedan ser vendido por un tercero, como sucede en las tiendas de mascotas.