Un hombre australiano se comió un lagarto por una puesta y muere a pocos días de ingerir el reptil de salmonella.
David Dowell fue retado por sus amigos a ingerir el reptil durante una fiesta y a los días, fue llevado a un centro asistencial de emergencia.
Los doctores le diagnosticaron salmonella, debido al consumo del lagarto sus testículos se le inflamaron como el tamaño de una toronja.
El consumo del lagarto hizo que su salud empeorara mas comenzo a vomitar bilis verdes, se le inflamo notablemente el vientre, su orina se volvió negra y sus pulmones se llenaron de líquido procedente del estómago.
Dowell falleció durante una operación con la que los médicos pretendía corta la indecisión, luego de estar una semana hospitalizado.
